Por Lic. Reinier Barrios Mesa(barrios@rflorida.icrt.cu)
Los intentos por hacer de Florida una tierra diferente, comenzaron desde enero de 59, cuando el gobierno revolucionario tomó posesión y comenzó a dictar leyes y medidas para entregar a los habitantes del país las riquezas que desde aquí se generaban y borrar para siempre los atropellos que sufrían sus hijos.
Así fue como el 22 de noviembre de 1959, apenas a 11 meses del triunfo, el viejo cuartel del ejército de Batista se convirtió en un centro educacional con el nombre de José Martí, albergando a cientos de niños que en ese recinto se acercaron por primera vez a las letras y los números.
Los muros que antes habían escuchado los quejidos de los torturados cuando la guardia rural y el ejército ubicado allí reprimían las manifestaciones de descontentos de aquel tiempo, acogían ahora las sonrisas de los niños con el sueño de aprender.
En los últimos 49 años el viejo cuartel albergó a muchas generaciones de floridanos, quienes vieron a esa escuela como un centro insigne de la educación del territorio, al tiempo que sus aulas y salones sirvieron de sede a importantes eventos científicos y culturales.
Después de una reparación capital fruto de la batalla de ideas, nuevas aulas se anexaron al antiguo edificio, se construyó un comedor y una plaza para la realización de matutinos y actos patrióticos, se colocaron televisores en cada local y una red interna para el visionaje de videos y otros materiales educativos.
La escuela que prestigia en Florida el nombre del Apóstol José Martí es pasado y presente, memoria y tradición, es hoy orgullo de los que aquí habitamos.
1 comentario:
Me parece siempre importante cuando escribes sobre la historia y la enmarcas en un lugar determinado de Florida.
Esa habilidad que tienes tu de convertir la historia en algo personal y contextual capta la atencion de los que te leen. Es una manera educativa y creativa de hacer que la historia se llene de caras humanas y de recuerdo los cuales hacen que sea una historia de y sobre los seres humanos.
Deben ser unos cuantos los que han pasado por esas aulas del Centro Educacional Jose Marti durante casi un siglo por lo que estoy seguro que podrias recoger los testimonios de algunos de ellos si alguna vez decidieras darle un seguimiento a dicho articulo
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