Por Lic. Reinier Barrios Mesa(barrios@rflorida.icrt.cu)
Un mar de pañoletas blancas y azules, así como los personajes de los cuentos de la Edad de Oro y de otras obras escritas para los niños por el más grande todos los cubanos, inundaron otra vez las calles principales de Florida para homenajear al más grande los cubanos en el aniversario 156 de su natalicio.
El desfile recorrió las arterias de Presidente Gómez y Paseo Martí, y fue la ocasión propicia para que nuestros niños y adolescentes desplegaran múltiples iniciativas que demostraron la presencia constante de la obra del Maestro en sus vidas, así como la vigencia de su pensamiento durante estos últimos 50 años de Revolución.
Sobresalieron por su colorido y alegría, los colectivos pioneriles de las escuelas primaria y secundaria que llevan en Florida el nombre del Hombre de la Edad de Oro, así como los niños de Sierra Maestra, Enrique José Varona, y Manuel Ascunce Doménech, los cuales evidenciaron la labor de profesores e instructores de arte, en el incentivo a la práctica de diferentes manifestaciones del arte.
El tradicional desfile pioneril martiano puso punto final a una jornada que durante todo el mes de enero convocó a la realización de matutinos especiales, eventos científicos estudiantiles, intercambio con combatientes y visita a instituciones culturales del territorio, y que tuvo el homenaje y recordación al más grande los cubanos como el propósito esencial.
Un mar de pañoletas blancas y azules, así como los personajes de los cuentos de la Edad de Oro y de otras obras escritas para los niños por el más grande todos los cubanos, inundaron otra vez las calles principales de Florida para homenajear al más grande los cubanos en el aniversario 156 de su natalicio.
El desfile recorrió las arterias de Presidente Gómez y Paseo Martí, y fue la ocasión propicia para que nuestros niños y adolescentes desplegaran múltiples iniciativas que demostraron la presencia constante de la obra del Maestro en sus vidas, así como la vigencia de su pensamiento durante estos últimos 50 años de Revolución.
Sobresalieron por su colorido y alegría, los colectivos pioneriles de las escuelas primaria y secundaria que llevan en Florida el nombre del Hombre de la Edad de Oro, así como los niños de Sierra Maestra, Enrique José Varona, y Manuel Ascunce Doménech, los cuales evidenciaron la labor de profesores e instructores de arte, en el incentivo a la práctica de diferentes manifestaciones del arte.
El tradicional desfile pioneril martiano puso punto final a una jornada que durante todo el mes de enero convocó a la realización de matutinos especiales, eventos científicos estudiantiles, intercambio con combatientes y visita a instituciones culturales del territorio, y que tuvo el homenaje y recordación al más grande los cubanos como el propósito esencial.
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